José Fernández López fue el fundador de la empresa del sector de alimentación Pescanova, dedicada inicialmente al pescado congelado.
La idea de congelar el pescado surgió por la necesidad de transportarlo de caladeros lejanos sin que se pudriera, pues se habían agotado los cercanos y había que buscar nuevos en distancias en las que el hielo no podía conservar las capturas y la sal estropeaba la mayoría de especies. A José le catalogaron de loco cuando atracó en Vigo el primer barco con las bodegas repletas de 240 toneladas de merluza ''si son palos'' comentaba que le dijeron. Creyeron que sería incapaz de vender la mercancía, pero creó la primera red frigorífica española para distribuirla.
Desde entonces, la empresa no ha hecho otra cosa que crecer, hasta convertirse en un holding de noventa sociedades y una plantilla de 3.400 empleados.
Tras diez años de investigaciones ha ampliado su campo de acción inicial a la piscicultura, produciendo toneladas de rodaballo, dorada, lubina, salmón y langostino.
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